Un gran desafío es la inversión de valores. No son la personas más serias, más trabajadoras, o más estudiosas el marco de referencia para el éxito en nuestra sociedad y entre nuestros jóvenes. La más de las veces son los “Raperos”, que son un grupo de jóvenes que hacen algo que ellos llaman “Música”, y que muchas veces contiene letras que incita al desenfreno sexual, la violencia y otras formas de pecado. También están las , “Estrellas de cine” que junto con los “Artistas famosos”, nos dejan malos ejemplo de lo que es vivir una vida licenciosa, sin tomar en cuenta las leyes morales y los principios de respeto por Dios y los demás. Por otro lado están los Políticos inescrupulosos, para los cuales la política es un medio de escalar socialmente y no de servir a su país. Un pelotero profesional gana muchos miles de veces lo que un joven abogado o médico pueda soñar con ganar. El ser pelotero es una profesión digna, pero es indignante que una persona que estudia 12 o 15 años y trabaja 8 ó mas horas diarias, reciba una recompensa tan desigual. En nuestra sociedad, cualquier mujer moderna sentiría vergüenza de pararse en una reunión social y decir que su profesión es ser “Ama de casa”. Y para las sociedades modernas, levantar una familia, ser honesto, estudiar y trabajar dignamente no es una referencia de ser exitoso. Lo que se promueve, lo que vende, lo que se estimula por los medios de comunicación es el músculo y la belleza femenina, las diversas formas de prostitución, la corrupción, el robo, el crimen... Si usted anda en un vehículo último modelo, viste ropa “De marca” y a la moda, tiene una o varias casas llenas de los más variados lujos y cosas innecesarias, y muestra una prosperidad que sea evidente a todos, no importa como lo haya conseguido, usted es una referencia de lo que significa ser exitoso y de la manera en que la “VERDADERA VIDA” debe ser vivida.
Uno de los grandes desafíos del presente siglo es el consumismo. Consumismo es un término que se utiliza para describir los efectos de igualar la felicidad personal a la compra de bienes y servicios o al consumo en general. El caso es ejemplificado por la frase:
Cuanto más consumo, más feliz soy
. El exceso de bienes producidos alimenta un espíritu desmedido de consumo, a través de técnicas manipuladoras que generan en el hombre el ansia de tener y poseer, de guardar, de acumular. La masiva publicidad en los medios de comunicación se encarga de “Crearnos necesidades” y hacernos creer que nuestra felicidad depende de la satisfacción de cada deseo. De modo que a veces tenemos más de lo que necesitamos, pero seguimos acumulando, y no estamos contentos, porque nos hemos dejado influir por la corriente de este mundo. Un ejemplo de lo que esto significa: Una hermana me cuenta que visita una amiga que tiene tantos zapatos que no sabía cuantos eran. Se decidieron a contarlos y la cantidad llegó a 100. Si ella usará 2 pares de zapatos por día, podría usar cada uno en promedio 7 veces en el año. Esto significa que, por el poco uso, cada zapato podría durarle entre 15 y 30 años. De modo que esta persona no necesitaría comprar más zapatos por todo ese tiempo. Pero, ¿Qué ustedes creen que es lo primero que esta persona compra cuando va de tiendas?...Precisamente MÁS ZAPATOS. Es posible que muchos de los que ya tiene no los vuela a usar, no porque estén dañados o feos, sino porque NO ESTAN DE MODA. Este caso es solo una ilustración de lo que en menor en mayor medida pasa con nuestra sociedad moderna en sentido general.
En la próxima entrega veremos cómo podemos vencer estos desafios. Cuales son las ayudas que Dios nos facilita para salir triunfadores.
Dios les bendiga .
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